
No bastó el lobby de EE.UU, Israel, Palau e Islas Maschall, para que la gran mayoría de los miembros de la asamblea tensaran su solidaridad con la revolución Cubana y su incansable lucha por la autodeterminación política y económica.
La resolución de la Asamblea es consecuencia de la presentación, por parte del Gobierno cubano, de los aspectos negativos y nocivos del embargo económico. Desde hace al menos 15 años que Cuba insiste en denunciar los horribles efectos del bloqueo y las duras secuelas en el bienestar de los ciudadanos de ese país.
La asamblea de Naciones Unidas, en un hecho histórico, no sólo condenó el bloqueo y exigió su abolición, sino además lo catalogó como "genocida y violatorio del derecho internacional". Lo que constituye un triunfo para la revolución cubana y su relación con el mundo.
La condena, se torna más relevante cada vez que George Bush (terrorista número 1 del mundo) pretende endurecer las medidas coercitivas contra la isla. Sin duda, se trata de un triunfo del pueblo cubano que con heroísmo y consecuencia camina por la senda del Socialismo.
Noviembre 2007
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