PSUV :UNA EXPERIENCIA DEMOCRATICA INEDITA

Invitado como observador por el Partido Socialista Unido de Venezuela, PSUV, tuve la valiosa experiencia de asistir el domingo primero de junio, en Caracas, a las elecciones nacionales a través de las cuáles esa fuerza política chavista eligió a sus 189 candidatos a gobernaciones y alcaldías. Junto a más setenta representantes de gobiernos, partidos y fuerzas sociales de diversas partes del mundo (entre los cuáles diplomáticos de Rusia, Siria, China, Vietnam, Ecuador, Bolivia, Argentina, Brasil y Cuba), pude conocer esas elecciones y escuchar del Presidente Hugo Chávez y del Canciller Nicolás Maduro, las razones políticas que hicieron de este evento un hecho cívico y democrático que trasciende las fronteras de Venezuela, pero que en ese país proyecta un impacto muy significativo para la vida democrática y para las futuras correlaciones político-electorales.Ciertamente que el punto de referencia anterior, en el contexto político venezolano, eran las elecciones de fines del año pasado, en las cuáles el gobierno del Comandante Chávez y las fuerzas que sustentan su régimen perdieron, por un muy estrecho margen. Pero, en esa ocasión, fue el propio jefe de estado quien reconoció los resultados, dando una nueva lección a quienes sin argumento alguno lo acusan de ser un gobernante autoritario.Ahora, las miradas de la oposición viceral pro yanqui, y las de la oposición que trata de hacer creer que es "alternativa democrática", estaban centradas en la transparencia del proceso electoral del PSUV y de la asistencia a votar por parte de sus militantes.El domingo primero de junio, en Caracas y en otras regiones de Venezuela, por algunas horas llovió intensamente.El PSUV tiene formalmente inscritos cinco millones setencientos mil personas, ciudadanos venezolanos con derecho a voto. Se trata de adherentes abiertos, es decir, no todos tienen una militancia estable y permanente. No todos participan de los batallones que son el organismo de base del PSUV.Los que no participan en los batallones y en los organismos regulares del partido, tanto en los espacios políticos como de masas propiamente tales, son una masa crítica que tiene sintonías, simpatías y también distancias con el proceso bolivariano. Por cierto, se esperaba que una parte importante de ellos no participara en las elecciones del domingo primero de junio.Pero, desde su corta fundación, el PSUV ha ido conformando una militancia y una estructura orgánica que, en estas elecciones, por primera vez, se ponía a prueba. Y esta era la militancia que se esperaba se pronunciara en las elecciones, y todos la iban a medir, en cantidad y calidad.Las elecciones fueron controladas por el Consejo Nacional Electoral de Venezuela, el mismo organismo estatal y autónomo que ha fiscalizado todas las elecciones nacionales de ese país, y que se ha dotado de un gran prestigio nacional e internacional por su transparencia y el sistema computarizado de votación.Las elecciones fueron realizadas en colegios y escuelas públicas en donde se instalaron las mesas. Y las Fuerzas Armadas, como en todas las otras elecciones, también fiscalizaron el proceso.El impacto que esto produjo en Venezuela fue nacional, y nadie pudo cuestionar su transparencia, ni siquiera los sectores opositores más vicerales que no perdonan nada a Chávez y su gobierno. Entonces, lo que hicieron fue ocultar el hecho, como también lo hizo la prensa internacional pro norteamericana.De los 189 candidatos, 141 fueron elegidos por más del 50 por ciento de la votación, y 48 con más del 15 por ciento respecto del segundo candidato.Una pequeña cantidad pasó al sistema de definición nacional, producto de las cercanías entre una y otra votación.Pero el otro hecho de impacto político-electoral de gran trascendencia es la cantidad de votantes que participaron en el proceso: Más de dos millones y medio de venezolanas y venezolanos que, convocados por el Presidente y el PSUV, asistieron a estampar su voto por un candidato.En el proceso electoral antes del día de votación, todas y todos los candidatos pudieron reunirse con asambleas y grupos de militantes y adherentes del partido, tanto para dar sus propuestas, así como para escuchar a las bases.El PSUV es un partido de muy reciente formación en donde se expresan varias orgánicas políticas que antes apoyaron al gobierno, y que ahora confluyen en este partido unido. Pero también el PSUV contiene una buena parte de personas que se incorporan a la actividad política por primera vez, convocados por la Revolución Bolivariana.Fue prohibido que los candidatos hicieran campaña previa a través de medios de comunicación y prensa, y sólo se autorizó un impreso, igual para todos y con el mismo papel y color, con sus antecedentes fundamentales.El PSUV sale fortalecido del proceso; pero también la democracia participativa que impulsa el Comandante Hugo Chávez y su gobierno se proyectan con este acontecimiento.Están en muy buenas condiciones de ganar otras millones de conciencias para el proceso bolivariano, y millones de nuevos militantes en toda la línea, para esa revolución democrática hacia el socialismo del siglo veintiuno.La oposición interna al gobierno de Chávez ha buscado desconocer este evento cívico-democrático.También lo ha hecho la prensa sistémica en Chile y en todo el continente. De una forma brutal, se continúa en la campaña de mostrar al presidente bolivariano como un gobernante autoritario, no democrático. Se desconoce un hecho soberano que ningún partido o sistema político en Chile y en el continente ha realizado.Los indicadores para evaluar o medir las formas democráticas de elección en un partido político son diversos. Pero, en este caso, es más que evidente el sentido democrático y participativo de la elección, así como su impacto político y cívico en la misma sociedad venezolana. Quienes hablan y hablan de democracia, y con tanto engreimiento y prepotencia se dedican a "evaluar" si tal o cual país es democrático, deberían tener un mínimo de honestidad, y reconocer que hechos como el ocurrido y realizado en Venezuela, muestran incuestionablemente el sentido democrático y participativo del proceso que lleva adelante el gobierno del presidente Chávez, y su partido, el PSUV.

Fuente :Andres Lagos .Cronica Digital